Altea es una localidad alicantina situada a orillas del mar Mediterráneo. Destaca su casco antiguo de casas encaladas adornadas con flores y calles empedradas que descienden suavemente hacia el mar. Está considerada como una de las localidades más bonitas de la Costa Blanca. Ha sido nombrada capital cultural de la Comunidad Valenciana.
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Calle de Altea (7-2019).
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La población se fundó en el año 1617. De esta época se conservan algunas de las puertas de la antigua muralla por las que se accede al recinto renacentista de Altea. Se mantienen edificios de la época fundacional y una muy buena arquitectura de los siglos XVIII y XIX.
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Mirador de Altea (7-2019). |
La casa Cervantes es un edificio construido a principios del siglo XX por un estudioso de la obra del escritor
Miguel de Cervantes, nacido en
Alcalá de Henares. Es de estilo ecléctico, con detalles neomudéjares. Destaca la decoración de su blanca fachada.
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Casa Cervantes (7-2019). |
La iglesia de Nuestra Señora del Consuelo es el templo principal de Altea. Situada en lo alto de la localidad, fue construida a principios del siglo XX. Destaca su gran cúpula central revestida con teja curva vidriada en azul y blanco. Por ella Altea es conocida como la cúpula del Mediterráneo. Anexa a la iglesia se encuentra la capilla del Santo Cristo, edificada en el año 1854.
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Iglesia de Nuestra Señora del Consuelo (7-2019). |
Alrededor de la iglesia se extiende el pueblo antiguo, conocido popularmente como El Fornet. Al encontrase en lo alto de una colina, existen numerosos miradores sobre la bahía de Altea, con la
serra Gelada de fondo. Uno de ellos es el mirador Cronistas de España, situado sobre la antigua muralla.
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Mirador hacia sierra Gelada (7-2019). |
La calle Mayor une el Portall Vell con la plaza de la Iglesia. Conserva su trazado original, construido con cantos rodados de piedra blanca y negra que le dan su singularidad.
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Portal Viejo y calle Mayor (7-2019). |
Las calles de Altea están llenas de tiendas de artesanía y de ropa. La belleza de la localidad ha atraído no sólo a turistas sino también a artistas de distintas disciplinas: poetas, cantantes, pintores, escultores y ceramistas. Es el caso del pintor Benjamín Palencia que pasó sus últimos años de vida en la localidad
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Calle comercial de Altea (7-2019). |
Durante el siglo XIX la vida comercial se trasladó hacia el núcleo urbano próximo al mar. Aquí se encuentran dos puertos, uno pesquero y otro deportivo. Un largo paseo marítimo los comunica con el pueblo. Cuenta con multitud de tiendas, cafeterías, restaurantes con terrazas veraniegas y un concurrido mercadillo callejero.
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Paseo marítimo de Altea (7-2019). |
En el término municipal se encuentra la iglesia ortodoxa de Altea. Fue el primer templo ortodoxo edificado en España. Está dedicado al arcángel san Miguel. Es una réplica de una iglesia ortodoxa rusa del siglo XVII, realizada con materiales traídos desde la región de los Urales.
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Iglesia ortodoxa de Altea (7-2019). |
Por la parte norte del municipio y por su bahía pasa el meridiano de Greenwich, también conocido como meridiano cero. A partir de este meridiano se miden las longitudes. Corresponde con la circunferencia imaginaria que une los polos. Recibe su nombre por pasar por el antiguo observatorio astronómico del distrito londinense de Greenwich.
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Sello de Reino Unido del año 1984 del meridiano de Greenwich.
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Al norte de la población se encuentra la
sierra de Bernia que sirve de barrera natural entre las comarcas de la Marina Baja y de la Marina Alta. Su máxima elevación es el pico Bernia, de 1.126 m de altitud.
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Sierra de Bernia (7-2019). |
En la ladera del monte se levanta el fuerte de Bernia. Fue construido en el año 1562 por orden del rey Felipe II de España para prevenir las revueltas de los moriscos y defender la costa de los ataques de los piratas berberiscos. Tras la expulsión de los moriscos en el año 1609, se produjo su desmantelamiento.
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Fuerte y sierra de Bernia (7-2016). |
El tambor de granaderos es una zarzuela con música del compositor alicantino Ruperto Chapí. Fue estrenada en el Teatro Eslava de
Madrid en el año 1896. El libreto en castellano sitúa la acción en Madrid en el año 1812. Su obertura es la parte más conocida de la partitura, constituyendo una obra habitual en las salas de conciertos de música clásica
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